Pollo salteado con champiñones al curry

¿No se te ocurren muchas ideas para la cena de hoy y estás aburrid@ de cenar pechugas de pollo? Pues prueba esta manera diferente de tomar la pechuga de pollo: Pollo salteado con champiñones al curry. Es una cena ligera y muy sana ideal para cuidarse durante todo el año, que reúne los beneficios del pollo con los de la cebolla y los champiñones, mi "verdurita favorita" entre todas, con un toque del exótico sabor del curry. Yo preparo a menudo este plato para la cena, pero, evidentemente, podría ser un segundo plato perfecto para la hora de comer.

Bueno, pues ahí va la receta:


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INGREDIENTES (para 2 personas):

• 100 gramos de champiñones.
• 1 pechuga de pollo por persona.
• 1 cebolla mediana.
• ½  cucharadita de curry.
• Sal y pimienta.
• Aceite de oliva.

PREPARACIÓN:

1. Limpiar los champiñones y picarlos en gajos. 
2. Pelar y picar la cebolla en trozos gorditos, más o menos en cuadraditos de uno o dos centímetros para que se aprecien bien al comer.
3. Con un cuchillo o unas tijeras cortar la pechuga de pollo en daditos y salpimentarlo. Reservar.
4. Sofreír la cebolla en un wok o en una sartén grande con 1 ó 2 cucharadas de aceite de oliva, a fuego medio-fuerte sin parar de remover durante 3-4 minutos.
5. A continuación agregar el pollo a la fritada de cebolla. Subir el fuego para dorar el pollo removiéndo y mezclándolo todo unos 4-5 minutos.
6. Añadir los champiñones y remover hasta que esté bien hecho. Otros 5 minutos más o menos.
7. Cuando ya esté listo, salpimentar y echar el curry al gusto. Remover los ingredientes una vez más para que se tome el sabor de la especia.

Consejos y Trucos:

• Se pueden utilizar champiñones de lata por comodidad, pero a mi no me gustan mucho los champiñones en conserva. Los prefiero frescos o congelados. En el supermercado de mi pueblo los venden congelados en bolsas, de la marca Findus o Frudesa, no lo recuerdo bien. Y tienen prácticamente el mismo sabor que los naturales. Para tener éstos listos para usar en la receta hay que calentarlos a parte durante unos minutos en una sartén  hasta que se descongelen y suelten una gran cantidad de agua. Después escurrirlos y utilizarlos directamente en el salteado de pollo.
• Si se utilizan los champiñones frescos, que indudablemente están mucho más sabrosos, hay que limpiarlos muy bien. La técnica de limpieza que yo uso es de la manera siguiente:

1. Lleno un bol con agua y disuelvo en ella una cucharada de harina. Ésto es para que no se ennegrezcan, pero en vez de harina también se puede echar zumo de limón.
2. Voy cogiendo uno a uno los champiñones y les quito la parte de la raíz en el tronco.
3. Con un cepillito suave quito la tierra y los voy echando en el bol. También podría ser con un paño de cocina.
4. Después los aclaro bajo el grifo para quitarles cualquier resto de tierra.
5. Se escurren y se secan con un paño, y ya están listos para cortarlos y cocinarlos.